Coreografías y dirección: Estefanía Miceli
Obra de artes escénicas que pone en jaque cuatro elementos fundamentales sobre los que se basa la idea de la construcción de identidad. EL PODER, LA DEMOCRACIA, LA LIBERTAD y LA SEXUALIDAD, como problemáticas del mundo, como problemas humanos, no solo conceptos de género, sino poder comprender quienes somos, qué hacemos, qué
repetimos. Abordada desde distintas generaciones, interactiva; desarma el tiempo, el espacio y le da el poder al espectador de cómo ser contada, es decir los espectadores votan la cronología de la obra.
Tres elementos, diez mujeres y dos números, construyen un universo ambiguo, crítico, y analítico donde el espectador se enfrentará a sí mismo, enfrentará a Rebecca y a su idea de ser.
Danza-teatro-música-performance se conjugan para jugar con las tensiones del sujeto, todo lo que lo cruza y construye, la idea de mujer, el concepto de definición de un sistema y la muerte de los meta-relatos.
Rebecca es una, es todas y es todos. Es la voz de todos los tiempos, distintas generaciones y de los que no tienen voz, que se pregunta por qué hace lo que hace; que significa ser mujer en el mundo en el que está inmersa, en que se equivocó y si es realmente libre como sujeto.
La obra atraviesa los relatos y cuestiona los mandatos en los que todos estamos inmersos, especialmente las feminidades, en torno al poder, la libertad, la sexualidad y la democracia.
Rebecca abraza el desafío de pensar quiénes queremos ser y nos propone atrevernos a lograrlo.
Con el apoyo de Mecenazgo. Patrocinada por el Banco Santander. Beca a la Creación del Fondo Nacional de las Artes
De Estefania Miceli
Por MUUK Artes Escénicas
Intérpretes: Estefanía Miceli, Rocío Durí, Gisela García, Luciana Páez, Natalia Santoro, Paloma Cavalo, Marcela Pesquero, Silvia Rañal, Angeles Gonzalez, Camila Calvi, Sofía Blanpain
Montaje escénico: Estefanía Miceli y compañía
Asistencia: Camila Calvi, Sofía Ayala
Diseño de vestuario: Estefanía Miceli. Viviana Forucade
Vestuarios: Viviana Fourcade
Música: Gastón Urioste
Utilería: Rodolfo Martín Barrere, Ramón Colman Recalde
Gráfica: EME comunicación
Fotografía y video: Lucho Mercado Herrera-Filmmaker
Marketing digital: NDigital Agencia
Prensa: Prensa Novello
Comerciales: Pablo Iñigo
Coreografías y dirección: Estefanía Miceli
Duración: 60 minutos
CELCIT. Temporada 2023
Nota realizada por Silvina Macri.
Estefanía Miceli, es Licenciada en Composición Coreográfica egresada de la U.N.A (Universidad Nacional de las Artes). Profesora Superior de Danza Contemporánea y Clásica egresada del ISA. Formada en diversas técnicas de movimiento, como también en otras áreas artísticas, entre ellas, artes plásticas, teatro… Se perfeccionó con maestros del exterior en el área de Danza. ALGUNOS DE SUS LOGROS Proyecto ALLÁ de Madrid – España elegida como coreógrafa Innovadora de la Argentina. Dos obras de su autoría fueron Declaradas de Interés Cultural de la Nación. Ganadora de la beca a la Creación del Fondo Municipal de las Artes. Finalista del premio Mujer Empresaria Bonaerense 2019 por la FEBA, CAME Y MEFEBA Ganadora de MECENAZGO (Régimen de Participación Cultural del Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires). Ganadora de la Beca a la Creación del Fondo Nacional de las Artes. Sus obras fueron parte de Festivales en Colombia, México, Brasil, Barcelona. Realizo con sus producciones gira a Uruguay formando parte de la programación del Auditorio Nacional del Sodre y en México en dos oportunidades. Sus obras fueron parte del V Congreso de Lucha contra la trata de personas, y a beneficio de la Fundación María de los Ángeles, finalista de los Premios Estrella de Mar, en varias ocasiones formo parte de la Noche de los Museos, como también fue seleccionada con mención especial también para la Fiesta Regional de Teatro Independiente del CPTI en dos oportunidades. Dicto Clases, Talleres y Residencias a nivel Nacional e Internacional.
E.A.: Cuál fue el disparador para comenzar el camino creativo del espectáculo?
E.M.: Me dedico a la danza, pero estoy cruzada por el teatro, la performance y las artes visuales…la obra, aunque no lo crean no inicio desde el cuerpo como espacio de experimentación, como suele pasar en la mayoría de las obras que tienen danza, donde primero lo investigan kineticamente y luego lo habitan; sino que el proceso creativo partió de textos, escritos, reuniones de debate y juegos de palabras. Me llevo 4 años de investigación, donde mi prioridad era buscar y lograr objetividad sobre la subjetividad. Cada una de las intérpretes, tiene voz, trabaje con cada una de ellas en particular, esto hace que, si se modifica el elenco, la vivencia escénica se ve afectada y transformada. Partí de la experiencia individual de cada una, para luego poner en debate generalidades. Creo, mirando para atrás, que LA MUJER Y LA MUERTE DE LOS META-DISCURSOS, como temas, fueron el punto de partida, me preguntaba cuanto era perspectiva de genero lo que se ponía en mesa de debate, y cuanto era cuestiones humanas, atravesadas por el género.
Siempre una necesidad incansable de derribar los parámetros de espacio-tiempo, me reuní con una gran maestra que es semióloga y me dijo “Estefi, es por acá, deconstruí la mirada vertical de como se entienden los conceptos de construcción de identidad”. Con esto entendí, que no se trataba de un hecho en particular, sino que eran situaciones que a lo largo de la historia se repetían una y otra vez, entendí que era una suerte de evolución, sobre lo que se luchaba y por lo que se lucha ahora y cual era nuestro lugar como mujeres en relación al discurso…ahí nació la idea de los cuatro bloques, lo aleatorio, y algo que leía una y otra vez, era el poder que se ejercía sobre los discursos, mandatos o estándares sociales; con lo cual me dije: “porque no darle el poder al espectador de leer la historia bajo su responsabilidad de elección”!, ahí se abrieron puertas como el vacío en relación a la libertad, y llevar al extremo el análisis de que fue primero en la historia: “si el huevo o la gallina”. La posibilidad de votar por donde se inicia, es un poco poner aun mas en jaque como se vive y como se cuenta la historia, los recortes y que sentido toma cada suceso cuando le cambiamos el foco…y como puede ser alterada según quien la lea y como la fraccione.
E.A.: La danza como idioma de expresión, el cuerpo en escena, como puente donde Rebeca toma cuerpo, forma, y dice… ¿Qué visibiliza la obra?
E.M.: Rebecca es una y es todos, es la voz de todos los tiempos, de distintas generaciones y de quienes no tienen voz. Permite que el espectador desarme su historia individual, a través de la historia de Rebecca. El poder, la democracia, la sexualidad y la libertad, son los temas de análisis y debate dentro de la obra, la ruptura de lo espacio-temporal, en torno a la construcción de la idea de la identidad del sujeto. El poder como vinculaciones sadomasoquistas entre sujetos, entre los mandatos sociales. La democracia como la muerte del discurso pre-establecido, las cenizas que pululan en el espacio, como lugar de referencia. La sexualidad como una suerte de identikit, “cuál es la definición que me calza para definirme?”, entendiendo que las teorías nacen en reacción y oposición de otra teoría, pero cuando lo analizas te das cuenta que es una cuestión de evolución de un discurso, donde todo convive y es muy difícil el blanco o negro, cuando preponderan los grises sin ninguna duda…Y la libertad, acá es un dato no menor, la libertad tomada desde evidenciar nuestros propios miedos, porque creo que cuando llegamos al fondo, a nuestra oscuridad, a nuestras miserias y podemos ponerlas en palabras, podemos soltarlas y liberarnos de ellas…Todo se desarrolla en formato juicio, donde hay un tribunal, una sentencia y se espera un veredicto. Es un poco como se juzgaron los roles en la historia no? Un juicio moral y ético, donde Rebecca logra enfrentarse y enfrentar, donde se da cuenta que todas son ellas y ella es todas…Trabajando el pasado, el presente y el futuro…lo que veo y dejo ver. Los cuerpos y el desarrollo escénico y estético están al servicio del contenido. Cada estructura tiene un análisis exhaustivo en relación al lenguaje, al diseño al igual que la utilización de la palabra, al servicio de la narrativa no lineal y aleatoria que tiene.
E.A.: Cómo fue tu comienzo, ese punto de inflexión donde avizoraste que tu camino era la danza, tu decir coreográfico?
E.M.: Yo inicie desde chica…a los 6 años hasta los 14 hice artes visuales, a mis 10 años empecé a estudiar danzas, ahí me di cuenta que la conexión fue de inmediato, tenía esa necesidad del decir desde otro punto, el ver en lo cotidiano una obra…primero era un juego de niños, hoy construyo jugando…Seguí creciendo, perfeccionándome, estudie con maestros del exterior, hice la carrera de la UNA, soy Lic. En Composición Coreográfica y me daba cuenta que en mi carrera siempre tenia una mirada integral del todo, no podía pensarme solo con el cuerpo, era el cuerpo, la música, el contexto, donde se aloja, el vestuario ..y podría seguir, soy una obsesiva del pequeño detalle, porque hago consciente que todo construye simbología y cuando entendes que la obra de arte es el resultado de un contexto social, político, económico, cultural, de donde se manifiesta, empezas hacer más consciente cada uno de los elementos de los que se vale la obra. A los 21 años arme la compañía y a los 25 años abrí la escuela…mi vida entera fue y es dedicada al arte, siempre me incline por el contenido, por los temas sociales, porque soy una ferviente critica de la danza. La gente se alejó de la danza por incomprensible muchas veces, con lo cual busco en mi línea de trabajo llegar al otro por medio de la danza con temas que te interpelan como humanos, es decir empatizar. Y si logre generar pensamiento crítico, logre un nuevo espectador para la tan amada danza, logre que se emocionen y cuestionen y se enamoren de la danza por lo que permite a la hora de contar una historia…entonces hice bien mi trabajo! Mirar donde otros tal vez no ven es poder ponerse también en el lugar del otro y yo exploro mucho la creación pensando en ser espectadora y no interprete o creadora…la gente no viene a verme a mi, viene a construir una historia donde también es parte…y si se siente parte entonces hay vinculación y no contemplación, hay cercanía y no distancia…en fin somos movimiento y somos acción permanente y mientras se tenga una pregunta, habrá un tema y si lo llevo a la acción entonces hay danza…
De Estefanía Miceli
Por MUUK Artes Escénicas
Rebecca es una, es todas y es todos. Es la voz de todos los tiempos, distintas generaciones y de los que no tienen voz, que se pregunta por qué hace lo que hace; que significa ser mujer en el mundo en el que está inmersa, en que se equivocó y si es realmente libre como sujeto.La obra atraviesa los relatos y cuestiona los mandatos en los que todos estamos inmersos, especialmente las feminidades, en torno al poder, la libertad, la sexualidad y la democracia. Rebecca abraza el desafío de pensar quiénes queremos ser y nos propone atrevernos a lograrlo. Una puesta con diez artistas en escena, en la que el espectador elige mediante una votación el orden de la obra. No te pierdas este espectáculo y contanos cuál es tu veredicto.
Funciones: sábados 20 hrs
Teatro Celcit – Moreno 431
Con coreografía y dirección de Estefanía Miceli, el CELCIT presenta “Expediente 21-47. El caso Rebecca”, espectáculo que podrá verse a partir de julio.
Realizado por MUUK Artes Escénicas, Miceli es además parte de esta propuesta que integra junto a Rocío Durí, Gisela García, Luciana Páez, Natalia Santoro, Paloma Cavalo, Marcela Pesquero, Silvia Rañal, Ángeles González, Camila Calvi y Sofía Blanpain.
La obra podrá verse desde el primero hasta el 22 de julio, con funciones todos los sábados a partir de las 20 horas y entradas disponibles en la sede de Moreno 431 o en el sitio oficial del CELCIT.
“Expediente 21-47” representa una obra de artes escénicas que pone en jaque cuatro elementos fundamentales sobre los que se basa la idea de la construcción de identidad. El poder, la democracia, la libertad y la sexualidad, como problemáticas del mundo, como problemas humanos, no solo conceptos de género, sino poder comprender quienes somos, qué hacemos, qué repetimos. Abordada desde distintas generaciones, interactiva; desarma el tiempo, el espacio y le da el poder al espectador de cómo ser contada, es decir los espectadores votan la cronología de la obra.
De esta manera, tres elementos, diez mujeres y dos números, construyen un universo ambiguo, crítico, y analítico donde el espectador se enfrentará a sí mismo, enfrentará a Rebecca y a su idea de ser.
con Hernán Gené (España)
4 al 27 de noviembre de 2024
Lunes y miércoles de 13 a 15
con Ariel Barchilón
1º de marzo al 30 de junio
A definir próximamente
con Debora Astrosky
5 de marzo al 18 de junio
Miércoles de 19:30 a 21:30
con Gustavo Schraier
10 de marzo al 30 de junio
Lunes de 9 a 10:30
con Eloísa Tarruella
17 al 28 de febrero
Lun, mie y vie de 11 a 13