De Gustavo Garabito y Mariana Kohen. Dirección: Gustavo Garabito
Grupo La Naranja Retáblica.
De Gustavo Garabito y Mariana Kohen
Grupo La Naranja Retáblica
Intérpretes: Mariana Kohen, Patricia Herrera, Patricio Alvarado, Ariel Bottor, Gustavo Garabito
Escenografía: Myriam Salto, Gustavo Garabito
Música: Manuel Mansilla
Dirección: Gustavo Garabito
Este elenco se conforma en la Escuela de Titiriteros del Teatro San Martín y participa con este espèctáculo de la Muestra de Trabajos Finales de la Promoción 2010. Gustavo Garabito es integrante y fundador del Grupo de Títeres La Naranja Retáblica, con el que realiza espectáculos de performance y varietés desde 2003.
"Macbeth", maravillosa tragedia de William Shakespeare adaptada al verso con la simpleza y las carencias del lunfardo actual. Los títeres, versiones del "puppi siciliano", en este caso, prácticamente planos, realizados en su totalidad en cartón con unos cuantos pincelazos y basados estéticamente en la obra del artista plástico Michael Basquiat (New York, '80), se funden con el lenguaje urbano del hip hop, combinando ideas, estéticas y lenguajes diferentes para llevar al espectador esta versión renovada y de alguna manera actual, del clásico del teatro universal.
Este espectáculo integra el ciclo Teatro de títeres para adultos 2011
Espectáculo sin intervalo
Duración: 55 minutos
Temporada 2011
Obra de Gustavo Garavito y Mariana Kohen, con dirección de Gustavo Garavito
Versiones del clásico de Shakespeare hay muchas pero esta, sin dudas, es una versión muy particular. No sólo porque sea una versión para títeres (es necesario entender esta categoría en sentido amplio para no confundirse) sino porque los objetos de manipulación tienen características verdaderamente especiales a los que se suma la intervención de quienes los manipulan.
En primer lugar, y a grandes rasgos, son de cartón. Podría decirse éste es el material que predomina, no sólo en los títeres sino también en la escenografía. Macbeth vive en un sitio precario y solo puede obtener y repartir miseria. Villa cartón, sería un buen nombre para su reino “conquistado”. Paradigma de ello, el modo en que reemplazan la inicial de Duncan por la del nuevo rey. Ahora bien, las decisiones que suman y que significan son múltiples: por un lado, la manipulación no es igual porque no todos los objetos manipulados lo son (Malcom tiene rueditas y abre y cierra los ojos que es una belleza) pero además, Macbeth (¿y Banquo?) está armado de tal modo que tiene rostro adelante y atrás (ojos siempre atentos, vigilantes) “literalmente tiene ojos en la espalda” (las cosas que permiten los títeres).
El cartón, es innecesario decirlo, no es un material resistente, permite una fácil destrucción en las batallas y es sencillo de vencer con múltiples armas.
En más de una ocasión, los titiriteros asumen la acción por su cuenta y son ellos mismos objeto de enfrentamiento. Éste, que es un recurso entre tantos otros, deviene profundamente significante en un “cara a cara” con el espectro, un titiritero manipulando nada, ¿qué mejor modo de construir un fantasma?
La tragedia por otra parte, está actualizada a partir del uso de las palabras y de la música (hip hop), elementos centrales para inscribir estéticamente esta propuesta.
Por otra parte, el humor (negrito, sutil) así como los elementos autorreferenciales, incluso la materialidad de los títeres (ser de cartón prensado o de cartón corrugado) convierten esta pieza en acontecimiento para pensar y disfrutar en grande.
con Silvia Maldini
2 de mayo al 30 de junio
Sin horarios fijos
con Teresita Galimany
3 de abril al 29 de mayo
Miércoles de 19 a 21
con Alejandra Chamorro
1º de junio al 30 de julio
Miércoles de 19 a 21
con Cintia Miraglia
18 de mayo
19 h (hora Argentina)